Casa Escuela Pizcani nació para responder a las necesidades de los niños y niñas en comunidades marginadas, donde las instituciones estatales no lograban ofrecer apoyo suficiente. Inspirados por modelos de educación para la paz y pensadores como Ivan Illich, creamos un espacio que respeta los derechos humanos y la filosofía de La Nueva Escuela Mexicana. Aquí, los niños y niñas aprenden a través del juego y proyectos, en un entorno seguro que ellos consideran su hogar.

​

Nuestro mayor desafío ha sido enfrentar creencias adultocéntricas y conservadoras de ciertas instituciones. Gracias al diálogo y la participación comunitaria, hemos promovido cambios administrativos para garantizar el bienestar infantil.

​

El momento decisivo fue durante la pandemia, cuando madres trabajadoras necesitaban un lugar seguro para sus hijos. Esto llevó a la creación de nuestra primera comunidad en San Luis Potosí.
 

Desde entonces, hemos impulsado una nueva conciencia sobre la educación y una cultura de legalidad centrada en el cuidado infantil. Nuestro sueño es un mundo donde quepan todos los mundos y cada niño y niña pueda vivir plenamente.